viernes, 29 de junio de 2012

Violeta Parra

En una de mis hermosas salidas junto a mi novio tuvimos la oportunidad de ir al Centro Cultural Palacio La Moneda y de aprovechar la entrada a una de las tantas exposiciones, la de Violeta Parra.

Violeta del Carmen Parra Sandoval nace el 4 de octubre de 1917 en San Carlos, Región del Bío-Bío, Chile. Fue una cantautora, pintora, escultora, bordadora y ceramista chilena, considerada la folclorista más importante de Chile, y fundadora de la Música Popular Chilena. Miembro de la prolífica familia Parra.

Hija del profesor de música Nicanor Parra Parra y la campesina Clarisa Sandoval Navarrete, Violeta tuvo cinco hermanos y dos medio hermanos.

Nace en San Fabián de Alico, localidad en el interior de San Carlos. Su casa fue declarada Monumento Histórico en 1992.

Su infancia transcurrió en el campo, principalmente en Chillán y en Villa Alegre.

Violeta empezó a tocar la guitarra a los 9 años, mientras que a los 12 compuso sus primeras canciones. Realizó sus cursos primarios y estuvo un año en la Escuela Normal, que abandonó para trabajar en el campo.

Luego de la muerte de su padre en 1931, Violeta se fue a vivir a Santiago junto a su hermano Nicanor. Retomó los estudios en la Escuela Normal de Niñas, pero no eran los estudios lo que le gustaban, sino la música. Dejó la escuela y comenzó a cantar junto a su hermana Hilda, en un dúo llamado "Las Hermanas Parra".

En 1935, ya con toda su familia en Santiago, se casa con Luis Cereceda, con quien tiene a Ángel e Isabel. El matrimonio vivió en Llay-Llay, Valparaíso y Santiago, pero se separan en 1948 dado al carácter inquieto y distraído de Violeta.

A principios de los 50, comenzó su tradición musical en diversos barrios de Santiago y del país. Conoció a diversos poetas como Pablo Neruda y Pablo de Rokha. De este modo su hermano Nicanor la estimula a asumir una personalidad en contra de los estereotipos de la música chilena de aquellos tiempos. De este modo su repertorio se basó en las canciones tradicionales de campo chileno.

En 1953 grabó los exitosos sencillos "Casamiento de negros" y "Qué pena siente el alma", que se convirtieron en dos de sus canciones más conocidas. Al año siguiente (1954), mantuvo en la Radio Chilena el programa Canta Violeta Parra, y ganó el Premio Caupolicán a la folclorista del año, lo que le valió una invitación para presentarse en un festival juvenil en Varsovia, Polonia. Fue particularmente provechosa su estancia en París, ya que allí grabó Guitare et chant: chants et danses du Chili, editado en 1956, y una serie de canciones que incluían exclusivamente canciones recopiladas del folclore chileno. El éxito obtenido en Europa era inédito para cualquier artista chileno, y Violeta se llenó de inspiración y creatividad. Fue en París que se enteró de la muerte de su hija Rosita Clara.
En 1957 regresó a Chile y en noviembre se va con sus hijos Carmen Luisa y Ángel a Concepción, contratada por la universidad penquista. Allí funda, al año siguiente, el Museo Nacional del Arte Folklórico y posteriormente regresa a Santiago. Su actividad artística se diversificó: trabajó en cerámicas, pinturas al óleo y arpilleras. Trabajó un tiempo en un museo de arte popular y folclórico en la misma Universidad de Concepción, y luego viajó por todo Chile, ofreciendo clases de folclore y recitales.

En 1961 se fue a Argentina, donde vivió en General Picó y Buenos Aires. Ya en junio de ese año se va junto a sus hijos Ángel e Isabel a recorrer Europa y a establecerse en Francia, en donde sus dones artísticos continuaron, siempre recordando con gran nostalgia a su país.

En 1964 logró una marca histórica al convertirse en la primera latinoamericana en exponer individualmente en el Museo de Louvre. Escribió un libro "Poesía Popular de los Ándes" y la televisión Suiza filmó un documental sobre su trabajo "Vioelta Parra, bordadora chilena", una de las escasas fuentes audiovisuales que se conservan de ella. Durante esta etapa forjó una firme relación con el músico y antropólogo suizo Gilbert Favré, el gran amor de su vida.

En 1965 Violeta regresó a Chile, específicamente a la comuna de La Reina, con el plan de convertirla en un importante centro de cultura folclórica, junto a sus hijos Ángel e Isabel, y los folcloristas Patricio Manns, Rolando Alarcón y Víctor Jara, entre otros. A pesar de su bello sueño la carpa no tuvo una buena respuesta, y el público no la apoyó.

La indiferencia del público fue una de las razones que desencadenó su muerte. Luego del termino de la relación junto con Favré, quien se marcha a Bolivia (Run Run se fue pa´l norte), lo va a visitar y lo encuentra casado.

"Las últimas composiciones", grabado junto a sus hijos y al músico Alberto Zapicán, incluye sus himnos "Gracias a la vida" y "Volver a los 17".

El 5 de febrero de 1967, a los 49 años, y tras varios intentos fallidos, Violeta Parra se suicidó en su carpa de La Reina, dejando un legado de esfuerzo y sacrificio a Chile y el mundo. Mientras para muchos resulta paradójico que la autora de ese himno "Gracias a la vida" terminara suicidándose solo un año después de escribirla, otros críticos de su obra ven en la letra, en el estilo de musicalización, los tonos, y la monotonía de sus temas el reflejo de un estado de ánimo depresivo y una canción de despedida.

Pagina oficial: www.violetaparra.cl
Pagina de "Violeta se fue a los cielos": www.violetalapelicula.cl

Aquí les dejo un vídeo de las fotos que tome de una presentación animada de la vida de Violeta, que se presenta en el Centro Cultural Palacio La Moneda. Canción de fondo: "Que pena siente el alma."

Molka

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